

Sei Persei está que se sube por las paredes. Los ingenieros y militares del Couto Mixto, no fueron capaces de disparar la Bomba de Calor en la primera prueba efectuada el 24 de noviembre en A Vilavella.


En un arrebato de los de él, el comandante Siro, arrancó los cables y componentes de los ordendores de disparo y le espetó al Sr. Ingeniero Jefe: " Esto lo voy hacer a mí manera, pienso cebar la bomba con Cecrisina y yo mismo con un mechero le pondré fuego, así que poneros todos a cubierto". Tras dos intentos en vano, Siro en el tercero no consiguió nada más que un inaudible "paff" con la formación de un ridículo cráter y eso fue todo en la anunciada prueba de la Bomba de Calor.

CORRESPONSAL PRENSA VILAVELLA